sábado, 11 de octubre de 2008

"No Me Arrepiento de nada..."

Lunes, 08 de Septiembre de 2008 21:09 ALEXANDER MENDOZA / EL NACIONAL


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Henry Blanco está tranquilo, aunque le embarga una profunda tristeza. El viernes su nombre encabezó la lista de peloteros despedidos de los Leones del Caracas. Un secreto a voces luego que el receptor y ex capitán del equipo exigió la salida del manager Carlos Hernández y fustigó a la directiva por no haber intervenido para solventar los conflictos internos del club en una entrevista publicada por El Nacional hace casi siete meses.

"Me siento bien, pero muy triste por salir de los Leones de esa forma", comentó Blanco desde Cincinnati, donde los Cachorros de Chicago –su equipo en las grandes ligas– jugaban el segundo encuentro de una serie de tres contra los Rojos. "Pero me marcho con la frente en alto, con la certeza de que hice lo correcto, lo que era mejor para el equipo, mis compañeros y los aficionados. Es el precio que pagas cuando dices la verdad. La culpa siempre recae en los peloteros, nunca sobre la gerencia. Los errores siempre son de otros".
Blanco, de 37 años de edad, jugó 15 campañas con el Caracas, las últimas 3 como capitán, y es reconocido como uno de los principales referentes de la franquicia. Su nombre aparece entre los líderes vitalicios en los departamentos de juegos, dobles, empujadas, anotadas, jonrones y bases alcanzadas. Pero Luis Ávila, que sustituyó en la presidencia del Caracas a Ariel Prat, piensa que el veterano jugador no está por encima de la institución. "Se equivocó", dijo el ejecutivo el viernes cuando confirmó la salida del emblemático jugador.
"Los problemas internos no se pueden debatir públicamente en ninguna organización".
Blanco no comparte esa posición. "No me arrepiento de nada. Sentí que era el momento de decir lo que pasó. Era mi responsabilidad con mis compañeros, necesitaba protegerlos. Ellos (la directiva) nunca lo van a aceptar. La fanaticada merecía una explicación de las razones que llevaron a la eliminación del equipo. Por eso di la cara y salí a decir la verdad. Ellos nunca la dieron y los aficionados todavía están esperando escuchar razones.
Algunos directivos no tienen las pelotas para asumir lo que ocurrió".
Para él las heridas están muy recientes y tardarán en sanar. "Me duele salir así", insistió. Aunque le reconfortan sus logros con la camiseta de sus sueños. El respaldo de sus amigos. Los recuerdos que deja. "Nunca olvidaré esos momentos. El campeonato que ganamos cuando nadie creía en nosotros (2005-06) y luego la Serie del Caribe... El respaldo de mis compañeros José Castillo, Beto Méndez, Marco Scutaro, Luis Rodríguez, Alex Cabrera, pues aunque compartí sólo una temporada con él pudimos hacer una buena amistad. Es lo que me llevo, apartando lo malo".
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Blanco confirmó que Phil Regan, su antiguo manager en Caracas y actual piloto de Bravos de Margarita, lo llamó poco después de la reunión que sostuvo en Chicago hace una semana con Ávila y Oscar Prieto Párraga, cuando le informaron que sería separado de los Leones.
"Sí. Hablé con Regan, pero todavía no hay nada concreto.
Tal vez en una semana podría tener una respuesta", resaltó el careta. "Lo único seguro es que una vez que termine mis compromisos con los Cachorros voy a jugar en Venezuela como todos los años".
Cambiar de camiseta no será fácil. Blanco reforzó al Magallanes en la semifinal de la 200607, pero enfatizó que esta vez será diferente. "Ahora mismo no sé cómo lo asumiré", puntualizó. "Tampoco qué sentiré cuando enfrente a mis amigos, cuando nos encontremos de nuevo en el terreno. En este momento prefiero pensar en enfrentar a mis amigos.

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